SALTO, Agosto 30 (Por Valeria Vizzón, de la redacción de www.SaltoCiudad.com) Silvia Curutchet nació en Colonia, Uruguay pero desde los 18 años vive en la Argentina. Es aquí donde estudió Psicopedagogía y orientó su carrera al trabajo con los niños en situaciones de riesgo. Hace 10 años eligió Salto para vivir, y desde hace tres está a cargo de la conducción del Centro de Atención Temprana de Desarrollo Infantil.
María Cecilia Schechtel dedicó su vida a la educación, a practicarla en diferentes establecimientos educativos y a estudiarla. Psicopedagoga también, ama su profesión.
Ambas están comprometidas con lo que hacen, trabajan con niños de 0 a 3 años, con sus familias con el objetivo bien presente: darle solución a algunos de sus problemas, y acompañarlos en este tránsito vital que son los primeros tres años de vida. El martes por la mañana dialogaron con SaltoCiudad sobre la labor diaria, las problemáticas, y la niñez en estos tiempos.
¿Cómo surge el Centro de Atención Temprana?
Curutchet: Como toda institución surge por una necesidad. Esa necesidad la vio Sonia Chotro, que trabajaba en la Escuela Especial 501, y notaba que quedaba una franja etaria sin atención, los niños de 0 a 3 años. Ella empezó a trabajar, atendiendo a estos niños que tenían riesgo biológico, psicosocial o socio ambiental. Es así como se crea la institución, como servicio agregado a la 501. En 2005 se independiza, y adquiere autonomía, y luego de pasar por diversos espacios, se instala en el Hospital.
Schechtel: En general estos centros son bastantes nuevos en la provincia, todavía hay muchos que funcionan como servicios agregados.
¿Cómo está integrado el equipo de trabajo?
Curutchet: Contamos con siete cargos de maestras estimuladoras. Y un equipo técnico de Asistente Educacional, Social, Fonoudióloga y Terapista Ocupacional. También auxiliar, y chofer de camioneta. Una de las estimuladoras es psicóloga.
Schechtel: Tenemos distintas especialidades Dentro de las discapacidades, hay especialistas en mentales, en motores; eso hace al enriquecimiento en grupo.
Concuerdan los especialistas que los tres primeros años de vida del niño son fundamentales ¿Qué rol cumple la estimulación en ese período y que se puede transformar a través de la misma?
Curutchet: Nosotros orientamos, ayudamos a la familia para que ellos se conviertan en los primeros educadores de sus hijos. Lo que los padres hacen en las casas es fundamental. Tenemos situaciones muy difíciles; otras de mediano riesgo, y aquellas que pueden superarse fácilmente y salir adelante. Podemos decir que todos los niños que salen del centro se van con herramientas para hacer un camino. Sabemos que hay situaciones desde el punto de vista biológico que son irreversibles, pero por lo menos tratamos que los padres sepan cómo manejar esa situación de riesgo. También rescatar las potencialidades que tienen los chicos.
Schechtel: No sé si transformar pero se puede mejorar situación de la familia. Por ejemplo: si tenemos un chico con síndrome de down no va a cambiar su síndrome pero lo que va a cambiar es la forma de abordarlo.
Nombraron que ingresan niños con Riesgo biológico, problemas psicosociales y socio ambientales ¿Podrían desarrollar este último?
Schechtel: Lo socioambiental comprende las pautas de crianza que por ahí no están instaladas en todos los hogares. Hay muchas madres adolescentes que no son conscientes de lo que hay que efectuar para un mejor desarrollo: alimentación, horas de sueño y vigilia que debe tener un bebé, los controles médicos. Hay mucha gente que viene que no sabe leer ni escribir, entonces tratamos de decodificar lo que dice el pediatra.
Curutchet: Los niños aquí ingresan por una derivación proveniente de salud. Sabemos que los chicos de riesgo socio ambiental no trabajado y no acompañado luego será factible que tengan problemas en el aprendizaje. Lo socio ambiental atraviesa toda la educación y es básico. De 0 a 3 años se construyen los cimientos de la vida de cada persona. Como los cimientos de una casa; si no son fuertes la casa sucumbe. Si este cimiento no está fuerte la vida de estos niños es difícil.
Ustedes hace más de 20 años que trabajan con niños ¿Piensan que cambió la niñez?
Curutchet: Lo que ha cambiado es la sociedad y la cultura. Los niños responden a eso. La tecnología nos brinda mucho pero muchas veces desplaza los roles de los madres y los padres. Ha cambiado porque antes el papá era el que trababa, y la mamá permanecía en la casa. Ahora salen los dos y entonces los más pequeños muchas veces quedan al cuidado de los hermanos, u otros parientes. Hay muchas madres adolescentes, que la mayoría de las veces dejan de estudiar, son niñas adolescentes de 12-13 años. Esas con las chicas que muchas veces no saben bien que tienen que hacer. No tienen conocimiento de los controles, de preservar los tiempos de descanso. Preservarlo de la influencia tecnológica tanto de ponerlos a ver TV, o a escuchar música a todo volumen. Hay que pensar que el bebé tiene el órgano visual en desarrollo y es una agresión: lo mismo con el altoparlante. Y a veces una adolescente no lo sabe porque nadie se lo dijo, o no quiere comprometerse. Es un trabajo de idas y vueltas, de avances y retrocesos.
¿Cuál es la importancia de jugar?
Schechtel: Fundamental. Acá trabajamos desde el juego, enseñamos a jugar, es lo que se está perdiendo. El espacio de juego, la relación con el objeto, la relación de compartir. La consigna es venir a jugar, en ese jugar nosotros tenemos un objetivo. Que los padres jueguen con sus hijos, y el juego hace a la atención, la concentración, la creatividad.
Con la tecnología ¿Se ha ido perdiendo el juego?
Schechtel: Los niños juegan, pero se ha perdido el sentido del juego ¿Qué es jugar? Muchos chicos juegan en la calle, en lugares no apropiados, sin consignas. El juego tiene consignas, enseña a compartir con otro, con inicio y final. Hay juegos caseros, simples, no es necesaria una inversión en juguetes. El juego invita a pasar un momento placentero.
¿Qué son los Trastornos Generalizados del Desarrollo (TGD)?
Schechtel: Es una alteración de origen neurobiológico que se manifiesta habitualmente –aunque no siempre- en los niños durante los tres primeros años de vida. Todavía no se han determinado las causas concretas del origen de este trastorno, pero en algún punto las relaciones vinculares son determinantes. Por eso trabajamos el vínculo, fundamentalmente con la madre. Cuando eso no existe seguro va acusar recibo en alguna parte de su personalidad. Lo TGD muchas veces se ven agravados por un tema vincular. El niño percibe cuando hay amor madre e hijo, cuidado, y contención. Curutchet: estas situaciones que nombrábamos antes: socio ambientales o de maltrato, hacinamiento, embarazo no cuidado, situaciones de angustia, de tristeza, de consumo de drogas, exceso de bebida, situaciones genéticas, todo eso a medida que el niño va creciendo puede deparar hacia muchos lugares. Apostamos a una niñez sana, a tratar de que todos estos ruidos puedan estar controlados, que haya contención familiar, que los niños no tengan carencia de afecto, que sean amados por los padres.
Es una problemática que atraviesa todos los niveles sociales ¿Hay un cambio en la relación entre padres e hijos?
Schechtel: Sí. Se ha perdido la diferencia entre el adulto y los niños. Pasamos de una sociedad rígida a una en la que no se establecen diferencias entre el adulto y el niño. Y esa asimetría debe existir. El adulto es el adulto y el chico y es el chico. El chico se siente seguro cuando hay un adulto responsable. Por eso la importancia del límite, es la forma que el niño se sienta seguro en la vida, que va a crear su personalidad.
Es común escuchar la frase: “En mi casa el que manda es el niño”…
Schechtel: Sí y seguramente ese niño va a distorsionar en algún momento, son niños que no obedecen normas, no aceptan un no, se frustran rápidamente. Entonces quieren hacer lo que quieren, y se frustran sino pueden. La puesta de límites es importantísima: no es gritar, no es pegar, es decir que no. A veces también se tiene el recurso de cambiar el objetivo. Hay que enseñarles que somos los adultos los que mandamos sino los chicos no entienden quién manda.
Curutchet: Un juego reglado también ayuda adquirir conciencia de límite. Amar al hijo es también ponerle límites, se le está haciendo un bien.
¿En qué consiste el proyecto “Construyendo espacios lúdicos”?
Curutchet: Es un proyecto con la Fundación Arcor, que nos brinda herramientas y dinero para adquisición de material. Apunta a crear espacios de juego y es en Valacco porque consideramos el barrio más desatendido, donde hay muchos niños, un barrio carenciado desde todo punto de vista, con muchas madres adolescentes. Comenzó en marzo, costó que la gente se acercara, pero hoy se ha conformado un grupo.
¿Qué otros proyectos están llevando adelante?
Curutchet: Tenemos un Taller de juego integrado por niños que ingresan el año próximo en nivel inicial. La idea es fortalecer la socialización, una manera que los niños empiecen a interactuar porque una problemática –no en los barrios- es el hijo único. Son los jueves por la tarde.
¿Existe también un plan con los jardines de infantes?
Curutchet: Se llama “Mirando juntos”. Dos maestras estimuladoras observan a los niños que van a las salas de dos años. Luego de la observación, dialogamos con los padres, los orientamos.
¿Y las madres embarazadas?
Curutchet: También trabajamos con ellas. Esto es en forma articulada con la Inspectora de Educación Física, la de Psicología, la de Educación Especial y las escuelas secundarias. La idea es que las alumnas embarazadas en vez de ir a Educación física concurran a un taller de madres embarazadas con obstetra, maestra estimuladora y profesora de educación física.
Al funcionar en el Hospital ¿Tienen relación con Pediatría?
Curutchet: Vamos dos o tres veces a la semana para ver a las madres que han dado a luz, visitamos a los niños pequeños internados siempre con el mismo objetivo asesorar sobre pautas de crianza.
Schechtel: Nuestro trabajo es preventivo, empezamos desde el embarazo y seguimos hasta los 3 años. La atención temprana es el primer eslabón de la trayectoria educativa de un niño. No hay otro lugar que haga la articulación con el nivel inicial. Acá comienza la trayectoria
TOME NOTA
Dónde: el CEATDI funciona en el Hospital Municipal.
Cúando: de lunes a viernes, de 8 a 12 y de 13 a 17.
Es gratuito. Trabaja con obras sociales y también con aquellos que no tienen.
PARA AYUDAR
En este momento está circulando una rifa de la Cooperadora. La misma es para colaborar en la adquisición de material pedagógico, y para el mantenimiento de la camioneta que transporta a las familias que no tienen medio para llegar a la sede. El combustible está a cargo del Consejo Escolar. En la sede se pueden adquirir los números.
(www.SaltoCiudad.com)