Y un día llegó el momento en el Compañía volvería a ser Compañía y le devolvería a su gente todo el amor que estos le dieron. Finalmente y tras uno de sus años más exitosos, el verde de Salto se coronó campeón del Torneo organizado por la Unión Regional Deportiva.
Emoción, alegría, lágrimas y una felicidad que inundaron Junín fueron los sentimientos y sensaciones que se vivían en la cancha de Rivadavia, lugar donde se disputó la final del certamen y donde mágicamente, a pesar de ser visitante y de jugar un lunes por la noche, Compañía parecía más local que nunca.
“Esto es para la gente, por el apoyo de siempre y por todo lo que alentó a este equipo”, decía Carlitos Monacci, uno de los referentes del plantel tras terminar el partido. “No podemos creer lo que logramos, hemos quedado en la historia grande de este club que es nuestra casa. Acá muchos crecimos y hoy somos campeones”, continuaba Nicolás Páez.
Lo concreto es que Alejandro Santana, un técnico ganador que llegó al club a principio de año y con un montón de expectativas bajo el brazo depositó a este equipo de jugadores en lo más alto del fútbol zonal y hasta le devolvió esa estirpe de grande a un gigante desde hacía tiempo se mantenía dormido.
Al hablar de Compañía General a muchos se le viene el recuerdo de aquella campaña de 1994 donde triunfo en casi todas las canchas del país pero también como aquella institución golpeada, por errores de algunos particulares, que la dejaron prácticamente en ruinas y con un montón de cuestionamientos en sus espaldas.
Hoy, Compañía es el campeón y eso no se discute, tendrá mucho por delante pero lo vivido el día lunes 19 de diciembre de seguro no será olvidado por su gente en mucho tiempo. El gran club del interior de la provincia ha vuelto a resurgir y ahora va por más.
Salud campeón…